Inicia el día con una mañana rítmica en la que los niños despiertan todos sus sentidos, fortalecen la voluntad a través del movimiento, la coordinación, la memoria, el canto y la música. Este periodo facilita la integración del niño a la dinámica del día y lo prepara para aprender.

Es seguida  por  la  lección   principal, donde a través de historias y narraciones que los maestros preparan sobre los diversos contenidos, se establece una conexión entre el hacer, el sentir y el pensar que permite que los niños aprendan de una forma integral, considerando siempre las necesidades de cada etapa de desarrollo.

Al finalizar la clase principal se toma un refrigerio y un descanso para jugar y socializar.

Después tienen tres horas de talleres con maestros especializados como música, inglés y movimiento, así como manualidades, pintura en acuarela y modelado. En nuestra escuela todas las materias intelectuales, manuales y artísticas tienen la misma importancia. 

Todo el día va acompañado de versos que nos indican el inicio y cierre de cada actividad y del día, otorgando a los niños estructura y certeza; así como un ritmo saludable alternando actividades externas y trabajo enfocado.